Pesadillas. La mano del demonio

y voy a morir en un calabozo oscuro, absolutamente solo...

Levántate! mugrosa serpiente de rio... levántate!

(Y en el plato rancio de comida, 3 dias ha, vio una araña de carne, una pálida mano. Más horrenda que cualquiera, pues entre dos de sus falanges, como el tenedor ensarta albóndigas, dos ojos, bizcos. Con un coqueteo femenino lo miraron)

lutamente solo...

Vamos, anda! D35pi3Rt4, soy tu imaginación perdida, las últimas gotas de líbido que te quedan en tu cuerpo triste. arrástrate de una vez fuera, nunca más caigas presa de una mujer: te secarán más que las lágrimas. ¡Nunca más te mirarán así! NuNcA!!

(Los dedos del medio se apretaron -cuáles dedos?-, clavandose en la palma. El indice y el meñique se levantaron como cuernos. Mano Cornuta )

(El prisionero cerró, abrió los ojos y vio su cuerpo -desde afuera!- con las cuencas vacías. Mirando el plato aún, sintió el ruido de los motores en el patio ¿Como podía escuchar en el encierro? Y el sonido se hizo alto, ensordecedor, como si 3 mercedes estuvieran patinando en el fango. Y fundiéndose)

Se abre la puerta y la oscuridad de la celda se parte por un rayo de luz, que tiñe el polvo de la porqueria, las escamas de piel caídas, de un amarillo enfermo. Una sombra se cuela al interior. Uniforme ceñido a la cadera, una chica, ¡Una chica! -y no es Ella- camina, clip, clap, sus botas.
Tacones severos, porte regio.
Huele a ozono, su cuerpo crepita
Lleva lentes de piloto.

(Sigel, Sigel , la mujer de pelo claro estira una mano; un par de eses en su brazo, resplandeciendo. Qué uniforme será?)

"Er skyja skoldr, ok skinandi rodull, ok isa aldrtregi. rota siklingr.
Sol escudo de las nubes, rayo brillante y destructor del hielo"
Arriba Ivan. Vamos a anotar tu nombre por última vez. Estás fuera.